Asalto de Singra
Episodio bélico de la Guerra Civil española ocurrido a finales de enero de 1938. El Asalto por parte republicana de las posiciones que los franquistas tenían en Singra fue un episodio de la batalla de desgaste iniciada tras la conquista de la ciudad de Teruel en la Guerra Civil.
El general Varela estaba atacando desde el 17 enero de 1938 las posiciones más avanzadas de los republicanos en Concud y San Blas, intentando recuperar la ciudad de Teruel, y los republicanos contraatacaron desde el Campo de Visiedo con la intención de cortar las comunicaciones del valle del Jiloca y dejar aisladas a las tropas de Varela.
El ataque a las posiciones de Singra se iniciaron el 25 de enero y duraron hasta el 30 del mismo mes. Por parte nacional, la principal fortificación se encontraba en las Trincheras de "la Paridera de Allueva" (Singra), protegidas por un batallón, y en las fortificaciones de Torrelacárcel, aunque en las proximidades estaban de reserva cuatro escuadrones de caballería y uno de ametralladoras. Por el lado republicano encontramos a División 27, compuesta por tres brigadas y reforzada por 12 carros y 5 baterías. No pudieron sorprender a los nacionales, pues la noche del 24 un médico de la división se pasa al enemigo y alerta del ataque.
En el ejército republicano participó Avel-li Artis Gener, quien se consagró posteriormente en el mundo de la literatura. El ataque de Singra fue narrado en su autobiografía titulada "Viure i veure" (Editorial Portic), descrito como uno de los episodios que más han marcado su vida, pues murieron casi todos sus compañeros.
Los republicanos consiguieron tomar la localidad de Singra y la primera línea de trincheras, llegando a cortar la carretera Teruel-Zaragoza, pero no pudieron llegar hasta la vía del ferrocarril, pues fueron parcialmente frenados en las Trincheras de "la Paridera de Allueva" (Singra) y gracias sobre todo al ataque masivo de la aviación y al contrataque de un escuadrón de caballería y de tres carros. El día 29, último de la ofensiva republicana, los grupos de aviones rebeldes, marca Fiat, 2-G-3 y 3-G-3 consiguieron inutilizar a 6 tanques republicanos.
Aranda y Varela estuvieron a punto de quedar aislados de la retaguardia, pero lograron recuperar las posiciones en Singra. El 26 de febrero llegan refuerzos desde Villafranca y Monreal del Campo. El 29 de enero los republicanos se retiran hacia sus posiciones iniciales. El ataque había sido rechazado y la División 27, tras sufrir unas entre 900 y 2000 bajas (los datos son contradictorios), había quedado inoperativa.
El asalto a las posiciones de Singra hizo que Franco cuestionase la contraofensiva frontal para recuperar la ciudad de Teruel, siguiendo el valle el Jiloca. Las tropas republicanas en el Campo de Visiedo constituían todo un peligro, por lo que se optó por una estrategia envolvente, atacando a los republicanos en todo el frente abierto entre la venta del Diablo, Perales de Alfambra y Sierra Palomera. Se iniciaba la Batalla del Alfambra, como enfrentamiento previo para la recuperación de la ciudad de Teruel.
Bibliografía
- Tuñón de Lara, Manuel (1986): La batalla de Teruel. Teruel, Instituto de Estudios Turolenses.
- Martínez de Baños Carrillo, Fernando, coord. (2004): Guerra Civil. Aragón. Zaragoza, Delsan, pág. 313-314
- Solano Sanmiguel, Valentín (2006): Guerra Civil. Aragón: Teruel. Zaragoza, Delsan, pág. 183-189
- Artis-Gener, V. (1996): Viure i veure. Ed. Portic.
- Alegre Saura, E. (2013): "Una investigación familiar recupera datos olvidados de la batalla de Singra", en Diario de Teruel, 28/04/2013, p. 12.